Cómo organizar una fiesta de jubilación

Para organizar una fiesta de jubilación lo primero que debemos hacer, como en cualquier otra fiesta, es pensar en los invitados y el presupuesto. Podemos optar por una fiesta íntima, con poca gente. No obstante, al ser un momento tan señalado en la vida de alguien, quizá sea mejor optar por una lista un poco más amplia, con compañeros de trabajo, amigos y familiares. En cuanto al presupuesto, también es importante marcar cuánto estamos dispuestos a gastarnos.

El sitio es importante. Debemos pensar si queremos celebrarla en un restaurante, un bar estilo pub o una casa particular. Si contamos con una casa grande con jardín puede ser bastante útil. No obstante, también debemos pensar en la posibilidad de hacer una fiesta sorpresa, que siempre da buenos resultados. En este caso quizá sea mejor opción organizar el evento fuera de casa.

Si te decantas por la opción del restaurante deberás hacer una lista de aquellos que más nos gusten y pedir presupuesto a cada uno de ellos, barajando calidad y precio.

Otra opción es alquilar un local y contratar un catering. Si bien puede parecer una opción más cara, lo cierto es que el catering resultará mucho más económico que un menú de restaurante. Tan solo tenemos que hacer una lista de los servicios de catering de nuestra ciudad y elegir el que más se ajuste a nuestro presupuesto.

Aunque el tema de la fiesta está claro, la jubilación, podemos ceñirnos a una temática relacionada con el trabajo de la persona que se jubila. Así, si estamos ante la jubilación de un enfermero, podemos decorar el local con motivos relacionados con el mundo sanitario, hacer que los invitados incorporen en su atuendo algún complemento relacionado con este mundo e incluso preparar una tarta con forma de material sanitario.

Organizar una fiesta de jubilación implica pensar en algún que otro momento emotivo durante la celebración. Podemos preparar un brindis, con las palabras de alguien cercano al homenajeado. Otra opción es crear un video con fotografías y testimonios de las personas que lo han conocido durante su carrera laboral.

Finalmente, tras la comida, los brindis, abrazos y demás, seguramente la gente tendrá ganas de un poco de fiesta. Para ello, la mejor opción es contratar a un DJ y olvidarnos del tema de la música. No obstante, también podemos trabajar en una lista de reproducción con la música que al homenajeado le guste y ponerla a reproducir durante el final de la fiesta.

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